Casting para Josephine Blackwell

Si me preguntaran que es lo que mas odio de ser una anciana joven.. si eso es mas que obvio ya que yo tengo milenios y milenios de vivir, llega un punto en el que todo se vuelve monótono y lo que quieres simplemente es morir.
Morir y por fin descansar, eso si no te entra antes la avaricia de ver caer a los más grandes o incluso a los debiles, sentir que no pueden hacer nada en tu contra simple y sencillamente porque eres inmortal. Agradecía a sobremanera haberme matado practicando mis dones, desarrollandolos para que ninguna rata infeliz pudiera llevarme a la tumba a que me comieran los estúpidos gusanos que lo único que quieren es sacarte los ojos porque tienen hambre. Malditos parasitos!!.

Justo por eso no había dejado que mi escultural figura (ajá) se echara a perder, me mantenia siempre joven y bella mientras esperaba que el angelito reencarnado apareciera, no era justo! Yo a veces queria una vida normal, 1000 años de espera solo para que me trajeran un angel mas torpe que daban ganas de regresarlo a la tienda de regalos para bebé de donde vino. Esta vez había reencarnado como Jasmine una rubia que si bien no sabía nada de como manejar sus poderes sabia que era especial. Teníamos mucho trabajo por hacer y solo esperaba que no le diera por hacerse la tonta.
Esperé que llegara, las "clases" estaban por comenzar y Jasmine "benditamente impuntual" no se aparecia pero ni por asomo. Los tacones retumbaron en el salón y sin nisiquiera dar la vuelta la levanté del piso dejandola pegada contra la pared.

-Llegas tarde, de nuevo..!! Esto no es un juego. Esto es la guerra!!- reproché dandome la vuellta con rostro amenazante, a veces había que presionarlos para que respondieran más rápido.